El Instituto Chino Europeo es la academia Español - Inglés - Chino más conocida y prestigiosa en la comunidad china de Madrid y la única que ofrece servicios precisos de traducción al chino, inglés y español.
Nuestra experiencia incluye traducciones Español - Inglés - Chino para ONGs, empresas automovilísticas, fábricas en China, ayuntamientos, productos de maquillaje, constructoras internacionales, varios tipos de contratos, y correspondencia general.
Maria y Kiko tienen más de 10 años de experiencia cada uno y hemos dado clases a multitud de directivos y altos ejecutivos de empresas de distintos sectores como la banca, sector tecnológico, hotelero, construcción, formación (formamos a profesores universitarios), y sector del mundo del espectáculo (directores de cine y de teatro, productores, actores). También somos traductores e intérpretes.
Kiko es licenciado en Comunicaciones de San Francisco, California, y habla cinco idiomas. Maria está certificada por Han Ban, la organización mundial oficial del gobierno chino para la enseñanza del mandarín. Ella es licenciada en Administraciones de la Universidad de Nanjing.
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Maria y Kiko tienen más de 10 años de experiencia cada uno y hemos dado clases a multitud de directivos y altos ejecutivos de empresas de distintos sectores como la banca, sector tecnológico, hotelero, construcción, formación (formamos a profesores universitarios), y sector del mundo del espectáculo (directores de cine y de teatro, productores, actores). También somos traductores e intérpretes.
Kiko es licenciado en Comunicaciones de San Francisco, California, y habla cinco idiomas. Maria está certificada por Han Ban, la organización mundial oficial del gobierno chino para la enseñanza del mandarín. Ella es licenciada en Administraciones de la Universidad de Nanjing.
Entendemos que el Reglamento PRPS debería modificar su artículo 4 para eliminar la opción prioritaria de entrega del DF en soporte papel cuando la contratación es presencial, así como eliminar la obligación de que el cliente deba elegir expresamente otro soporte distinto del papel cuando la contratación es cara a cara.
We consider that the PRPS Regulation should modify its Article 4, so as to eliminate the main delivery option of the DF on paper format when the distribution is in person, and as such eliminate our obligation to provide the client the KD on paper format.
En línea con la tendencia natural derivada de los avances tecnológicos, la opción por defecto debería ser en todo caso independientemente del canal de distribución el soporte electrónico, tal como se establecen otras normativas europeas (normativa MFD) cuando regulan la proporción de información a inversores.
Following the lines of technological advances, the principal option should be in electronic format independently of the distribution channels, as established by other European norms and rules (MFD regulations).
Creemos que la opción de la entrega en soporte papel del KD debería mantenerse exclusivamente para aquellos casos en los que los inversores soliciten expresamente su proporción en soporte papel.
We consider that paper delivery should be kept only if the client expressly requests this format.
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En línea con la tendencia natural derivada de los avances tecnológicos, la opción por defecto debería ser en todo caso independientemente del canal de distribución el soporte electrónico, tal como se establecen otras normativas europeas (normativa MFD) cuando regulan la proporción de información a inversores.
Following the lines of technological advances, the principal option should be in electronic format independently of the distribution channels, as established by other European norms and rules (MFD regulations).
Creemos que la opción de la entrega en soporte papel del KD debería mantenerse exclusivamente para aquellos casos en los que los inversores soliciten expresamente su proporción en soporte papel.
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Muestras de traducción
Artículo traducido al inglés por The Instituto Chino Europeo para The Guardian Newspaper
De la sostenibilidad en un país llamado España en el año 2018
Hay indicadores en los que el país no solo está mal, sino que va a peor. Ejemplo de ello es el creciente número de trabajadores pobres o con empleos temporales en contra de sus deseos
Seguramente es por el alegre y cool logotipo, pero los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) están despertando un importante interés en administraciones, empresas, organizaciones no gubernamentales e incluso en los partidos políticos. Son un método para intentar medir la sostenibilidad y tener en cuenta los aspectos dinámicos en las cuatro áreas de análisis que se consideran esenciales: las personas (aspectos sociales), la ecología (medio ambiente) y la economía y la solidaridad (gobernanza). Aunque es cierto que gran parte de los objetivos están totalmente interrelacionados y aunque haya algunos en los que se obtenga buena puntuación, el logro es obtener buena puntuación en todos, es decir, no dejar ninguno atrás. Por esa razón estos indicadores reflejan de una forma más acertada el progreso de un país, mejor que, por ejemplo, el PIB u otros indicadores sintéticos.
Los indicadores seleccionados por la ONU son la herramienta más afinada para medir el progreso en los distintos países, pero, además, son fruto de un gran consenso científico y tienen en cuenta variables para medir el estado actual y las tendencias de la salud de los pueblos y por ello el grado en el que las políticas cumplen las buenas prácticas que inducen el progreso social, disminuyen la desigualdad, luchan contra el cambio climático, preservan el medio y usan con eficacia sus recursos. Tienen en cuenta incluso las principales amenazas para la vida que se han detectado hasta el momento: cambio climático, pobreza extrema, sequía, biodiversidad… Y atienden también al desempeño de las políticas de igualdad, tolerancia, protección de la infancia y liberación de la mujer.
Naciones Unidas publicó el 27 de junio su informe anual sobre sostenibilidad basado en los 17 ODS. Las conclusiones destacan sendos avances desde comienzos de siglo: la tasa de mortalidad materna en África subsahariana ha descendido un 35% y la de mortalidad de niños menores de cinco años se redujo a la mitad. En Asia meridional, el riesgo de una niña de contraer matrimonio en la niñez ha descendido más de un 40% y, en los países menos desarrollados, la proporción de personas con acceso a electricidad se ha duplicado con creces. En el mundo, la productividad laboral ha aumentado y la tasa de desempleo ha descendido. Más de 100 países cuentan con iniciativas y políticas de consumo y producción sostenibles.
Los problemas no se solucionarán con grandes declaraciones ni grandes lecturas de principios
Sin embargo, el informe también muestra que, en algunas áreas, el progreso es insuficiente para cumplir con las metas de la Agenda 2030. Esto es particularmente cierto para los grupos marginados y los más desfavorecidos; los jóvenes tienen tres veces más posibilidades de estar desempleados que los adultos y menos de la mitad de todos los niños y los adolescentes alcanzan los niveles mínimos de lectura y matemáticas. En 2015, 2.300 millones de personas permanecían sin acceso a un servicio básico de saneamiento y 892 millones de personas continuaban practicando la defecación al aire libre. Cerca de 1.000 millones de personas de zonas rurales aún carecen de electricidad. En África subsahariana, la incidencia del VIH entre las mujeres en edad reproductiva es 10 veces mayor que el promedio mundial. Nueve de cada 10 personas que viven en ciudades respiran aire contaminado.
Por otro lado, mientras que algunas formas de discriminación contra mujeres y niñas están descendiendo, la desigualdad de género continúa manteniendo a las mujeres en una posición más rezagada y las priva de derechos y oportunidades básicas. Los conflictos, el cambio climático y las crecientes desigualdades agregan nuevos desafíos. Tras un prolongado descenso, la cantidad de personas subalimentadas, aumentó de 777 millones en 2015 a 815 millones en 2016, en gran medida debido a los conflictos, las sequías y los desastres vinculados al cambio climático. En 2017, la temporada de huracanes del Atlántico Norte fue la más costosa de la historia, y la temperatura media mundial de los últimos cinco años fue la más alta registrada.
Por su parte, el Observatorio de Sostenibilidad (OS) ha realizado por tercer año consecutivo el informe anual #ODS18 sobre el estado y las tendencias de la sostenibilidad en España en 2018. En el documento se analizan tanto el progreso alcanzado como los desafíos para lograr los 17 Objetivos, según los últimos datos disponibles.
(Fuente: Observatorio de la Sostenibilidad)
España mantiene pésimos resultados en los ODS más directamente relacionados con las personas, las condiciones de vida y la justicia social. Los indicadores sociales están íntimamente interrelacionados y los valores de pobreza, paro, imposibilidad de acceso a la vivienda o desigualdad son facetas de un mismo problema. La evolución de los indicadores citados no es satisfactoria.
La tabla de tendencia muestra una progresión relativamente positiva en tan solo en tres de los 17 Objetivos. En concreto: del número 2 (hambre cero, alimentación sana, agricultura ecológica); del 11 (lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles) y del 12 (garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles). Los mayores problemas los detecta en los objetivos relacionados con agua, respecto a la desigualdad, y la acción por el clima, así como con el número 17 (tejer alianzas para lograr los Objetivos).
Hay que recordar que en el año 2017 hubo graves problemas de acceso al agua, sobre todo por la sequía y por la falta de una gestión inteligente del escaso recurso. La desigualdad siguió aumentando tanto en Índices de Gini como en cualquier otra medida, lo cual ya es un clásico de la economía española. Y, en relación con el objetivo relativo al cambio climático, el informe revela un aumento de las emisiones de CO2 del 4,5%; del 10% si se observa solo lo imputable a grandes empresas energéticas e industriales. En cuanto al ODS 17 cabe destacar que la ayuda exterior ha sufrido una importante disminución.
(Fuente: Observatorio de la Sostenibilidad)
Los mayores problemas se observan en los indicadores en los que no solo estamos mal, sino que tendemos a estar peor o no tenemos tendencias de mejora. Un ejemplo: nos seguimos encontrando con graves problemas de situaciones de pobreza entre personas con trabajo, hay además una tasa elevada de empleo a tiempo parcial no deseado, que afecta más a las mujeres que a los hombres, así como de contratos temporales no deseados.
Queda mucho camino por recorrer. Los problemas no se solucionarán con grandes declaraciones ni grandes lecturas de principios. Parece evidente que, con responsabilidades distintas, las empresas (grandes y pequeñas), todos los niveles de la Administración, las ONG y las personas debemos de trabajar para solucionar estas graves carencias que todavía tenemos para conseguir un futuro más sostenible.
En palabras de Antonio Guterres, secretario general de la ONU: “La tasa de progreso mundial no está logrando seguirle el ritmo a la Agenda para cumplir con sus ambiciones; es necesario que los países y las partes interesadas a todos los niveles tomen medidas inmediatas y aceleradas. (...) A tan solo 12 años del plazo del año 2030, debemos impulsar la noción de urgencia. El cumplimiento de la Agenda 2030 requiere medidas inmediatas y aceleradas por parte de los países así como alianzas colaborativas entre los Gobiernos y las partes interesadas en todos los niveles. Esta Agenda ambiciosa necesita un cambio profundo que vaya más allá de los negocios habituales”.
Fernando Prieto y Carlos Alfonso son miembros del Observatorio de la Sostenibilidad (OS).
Seguramente es por el alegre y cool logotipo, pero los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) están despertando un importante interés en administraciones, empresas, organizaciones no gubernamentales e incluso en los partidos políticos. Son un método para intentar medir la sostenibilidad y tener en cuenta los aspectos dinámicos en las cuatro áreas de análisis que se consideran esenciales: las personas (aspectos sociales), la ecología (medio ambiente) y la economía y la solidaridad (gobernanza). Aunque es cierto que gran parte de los objetivos están totalmente interrelacionados y aunque haya algunos en los que se obtenga buena puntuación, el logro es obtener buena puntuación en todos, es decir, no dejar ninguno atrás. Por esa razón estos indicadores reflejan de una forma más acertada el progreso de un país, mejor que, por ejemplo, el PIB u otros indicadores sintéticos.
Los indicadores seleccionados por la ONU son la herramienta más afinada para medir el progreso en los distintos países, pero, además, son fruto de un gran consenso científico y tienen en cuenta variables para medir el estado actual y las tendencias de la salud de los pueblos y por ello el grado en el que las políticas cumplen las buenas prácticas que inducen el progreso social, disminuyen la desigualdad, luchan contra el cambio climático, preservan el medio y usan con eficacia sus recursos. Tienen en cuenta incluso las principales amenazas para la vida que se han detectado hasta el momento: cambio climático, pobreza extrema, sequía, biodiversidad… Y atienden también al desempeño de las políticas de igualdad, tolerancia, protección de la infancia y liberación de la mujer.
Naciones Unidas publicó el 27 de junio su informe anual sobre sostenibilidad basado en los 17 ODS. Las conclusiones destacan sendos avances desde comienzos de siglo: la tasa de mortalidad materna en África subsahariana ha descendido un 35% y la de mortalidad de niños menores de cinco años se redujo a la mitad. En Asia meridional, el riesgo de una niña de contraer matrimonio en la niñez ha descendido más de un 40% y, en los países menos desarrollados, la proporción de personas con acceso a electricidad se ha duplicado con creces. En el mundo, la productividad laboral ha aumentado y la tasa de desempleo ha descendido. Más de 100 países cuentan con iniciativas y políticas de consumo y producción sostenibles.
Los problemas no se solucionarán con grandes declaraciones ni grandes lecturas de principios
Sin embargo, el informe también muestra que, en algunas áreas, el progreso es insuficiente para cumplir con las metas de la Agenda 2030. Esto es particularmente cierto para los grupos marginados y los más desfavorecidos; los jóvenes tienen tres veces más posibilidades de estar desempleados que los adultos y menos de la mitad de todos los niños y los adolescentes alcanzan los niveles mínimos de lectura y matemáticas. En 2015, 2.300 millones de personas permanecían sin acceso a un servicio básico de saneamiento y 892 millones de personas continuaban practicando la defecación al aire libre. Cerca de 1.000 millones de personas de zonas rurales aún carecen de electricidad. En África subsahariana, la incidencia del VIH entre las mujeres en edad reproductiva es 10 veces mayor que el promedio mundial. Nueve de cada 10 personas que viven en ciudades respiran aire contaminado.
Por otro lado, mientras que algunas formas de discriminación contra mujeres y niñas están descendiendo, la desigualdad de género continúa manteniendo a las mujeres en una posición más rezagada y las priva de derechos y oportunidades básicas. Los conflictos, el cambio climático y las crecientes desigualdades agregan nuevos desafíos. Tras un prolongado descenso, la cantidad de personas subalimentadas, aumentó de 777 millones en 2015 a 815 millones en 2016, en gran medida debido a los conflictos, las sequías y los desastres vinculados al cambio climático. En 2017, la temporada de huracanes del Atlántico Norte fue la más costosa de la historia, y la temperatura media mundial de los últimos cinco años fue la más alta registrada.
Por su parte, el Observatorio de Sostenibilidad (OS) ha realizado por tercer año consecutivo el informe anual #ODS18 sobre el estado y las tendencias de la sostenibilidad en España en 2018. En el documento se analizan tanto el progreso alcanzado como los desafíos para lograr los 17 Objetivos, según los últimos datos disponibles.
(Fuente: Observatorio de la Sostenibilidad)
España mantiene pésimos resultados en los ODS más directamente relacionados con las personas, las condiciones de vida y la justicia social. Los indicadores sociales están íntimamente interrelacionados y los valores de pobreza, paro, imposibilidad de acceso a la vivienda o desigualdad son facetas de un mismo problema. La evolución de los indicadores citados no es satisfactoria.
La tabla de tendencia muestra una progresión relativamente positiva en tan solo en tres de los 17 Objetivos. En concreto: del número 2 (hambre cero, alimentación sana, agricultura ecológica); del 11 (lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles) y del 12 (garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles). Los mayores problemas los detecta en los objetivos relacionados con agua, respecto a la desigualdad, y la acción por el clima, así como con el número 17 (tejer alianzas para lograr los Objetivos).
Hay que recordar que en el año 2017 hubo graves problemas de acceso al agua, sobre todo por la sequía y por la falta de una gestión inteligente del escaso recurso. La desigualdad siguió aumentando tanto en Índices de Gini como en cualquier otra medida, lo cual ya es un clásico de la economía española. Y, en relación con el objetivo relativo al cambio climático, el informe revela un aumento de las emisiones de CO2 del 4,5%; del 10% si se observa solo lo imputable a grandes empresas energéticas e industriales. En cuanto al ODS 17 cabe destacar que la ayuda exterior ha sufrido una importante disminución.
(Fuente: Observatorio de la Sostenibilidad)
Los mayores problemas se observan en los indicadores en los que no solo estamos mal, sino que tendemos a estar peor o no tenemos tendencias de mejora. Un ejemplo: nos seguimos encontrando con graves problemas de situaciones de pobreza entre personas con trabajo, hay además una tasa elevada de empleo a tiempo parcial no deseado, que afecta más a las mujeres que a los hombres, así como de contratos temporales no deseados.
Queda mucho camino por recorrer. Los problemas no se solucionarán con grandes declaraciones ni grandes lecturas de principios. Parece evidente que, con responsabilidades distintas, las empresas (grandes y pequeñas), todos los niveles de la Administración, las ONG y las personas debemos de trabajar para solucionar estas graves carencias que todavía tenemos para conseguir un futuro más sostenible.
En palabras de Antonio Guterres, secretario general de la ONU: “La tasa de progreso mundial no está logrando seguirle el ritmo a la Agenda para cumplir con sus ambiciones; es necesario que los países y las partes interesadas a todos los niveles tomen medidas inmediatas y aceleradas. (...) A tan solo 12 años del plazo del año 2030, debemos impulsar la noción de urgencia. El cumplimiento de la Agenda 2030 requiere medidas inmediatas y aceleradas por parte de los países así como alianzas colaborativas entre los Gobiernos y las partes interesadas en todos los niveles. Esta Agenda ambiciosa necesita un cambio profundo que vaya más allá de los negocios habituales”.
Fernando Prieto y Carlos Alfonso son miembros del Observatorio de la Sostenibilidad (OS).
Sustainability 2018, in a Country called Spain
There are indicators that not only is the country in bad shape, but getting worse. An example of which is the rising number of an increasingly impoverished workforce, or temporary contracts going against labor norms.
It could be due to the cool and perky logo, but the Objetivos de Desarrollo Sostenible (Sustainable Growth Objectives) is creating interest in public administrations, companies, NGOs and even political parties. Presented here are ways of trying to measure sustainability, taking into account dynamic aspects found within four areas of analytical studies considered essential: persons (social aspect), the ecology (environment), the economy, and solidarity (governance). While it is a fact that a large part of these objectives are completely interrelated and some even obtaining high scores, the objective is to get good scores in each and every aspect, not leaving one part behind. It is for this reason that these four indicators give a more accurate view of a country’s progress which, for example, is better than GDP or other artificial indicators.
The most refined tools to measure progress in various countries are used by the UN, of course, but beyond this, these tools are the fruits of a large scientific consensus that take into account variables to measure populations’ actual state of well-being, health trends and, therefore, the degree in which policies carry out laws that lead to social progress, the reduction of social inequality, the struggle against climate change, and last but not least the conservation and efficient use of the environment’s resources. What is also taken into account are the principal threats to human life that we have this present day: climate change, extreme poverty, drought, decreasing biodiversity, etc. Also noted are ways of carrying out policies dealing with equality, tolerance, the protection of children and minors, and women’s rights and freedom.
The UN published its yearly report on the 27th of June based on these 17 Sustainable Growth Objective factors. The results highlight clear progress at the start of the century: a 35% decrease in infant mortality rate in Africa, and a 50% mortality rate decrease in children under five. In southern Asia, the risks of forced marriages on young girls decreased by more than 40%. In developing countries, people with access to electricity has more than doubled. In our planet, workforce productivity has increased and, in turn, has seen a decrease in unemployment. More than 100 countries count on sustainable production and consumption initiatives and policies.
Problems are not solved with big announcements or lecturing on human principles
The report, however, shows that, in some areas, there is insufficient progress made when it comes to fulfilling the goals set by Agenda 2030. This is especially true in the case of marginalized and disadvantaged groups: the young are three times more likely to be unemployed compared to adults, and less than half of all children and adolescents get to half of the minimum level necessary in reading and mathematics. In 2015, there were 2.3 billion persons that did not have the basic human sanitary standards to live adequately and 892 million persons still had to excuse themselves in the middle of mother nature. Close to a billion people in rural areas live are without electricity. In sub-Saharan Africa, HIV cases among women of childrearing age is 10 times greater than the global average. On a final note, nine out of 10 city-dwelling persons breathe toxic air.
Furthermore, albeit some forms of discrimination against women and girls are decreasing, gender inequality keeps women behind that deprives them of their basic rights and opportunities. Global conflicts, climate change and other growing inequalities add to their new challenges. After a prolonged decrease, the number of undernourished persons went up to 777 million in 2015 and to 815 million in 2016, owing to, in large part, to geopolitical conflicts, droughts, and natural disasters related to climate change. The 2017 hurricane season in the north Atlantic was the most costly in history, and the average global temperature in the last five years registered at its highest since data started to be gathered.
For its part, the Sustainability Observatory has, for the third year, issued an annual report (#ODS18) about the state and trends with regards to sustainability in Spain in 2018. Using the latest data, the report analyzes the progress as much as the challenges in fulfilling the 17 objectives.
1. THE END OF POVERTY
2. ZERO HUNGER
3. HEALTH AND WELLBEING
4. QUALITY OF EDUCATION
5. EQUAL RIGHTS FOR MEN AND WOMEN
6. CLEAN WATER AND HYGENE
7. AFFORDABLE AND CLEAN ENERGY
8. DECENT JOBS AND ECONOMIC GROWTH
9. INDUSTRY, INNOVATION AND INFRASTRUCTURE
10. REDUCING INEQUALITY
11. SUSTAINABLE CITIES AND COMMUNITIES
12. RESPONSIBLE PRODUCTION AND CONSUMPTION
13. CLIMATE ACTION
14. UNDERWATER ECOLOGY AND LIFE
15. LANDBASED ECOSYSTEM
16. PEACE, JUSTICE AND SOUND INSTITUTIONS
17. PARTNERSHIPS AND ALLIANCES TO FULFILL OBJECTIVES
(Source: The Sustainability Observatory)
On a human level, Spain has continued with its dismal results in the Sustainable Growth Objectives scale, particularly in terms of social justice and living conditions. Social indicators are intricately linked, and factors such as poverty, unemployment, the inability to purchase a home, or inequality point to this same problem. The evolution of these aforementioned indicators is unsatisfactory.
The table showing the trends illustrate slight positive progress in only three of the 17 objectives, specifically: Number two (Zero Hunger, Healthy diet, Ecological agriculture); Number 11 (making cities and places with human concentrations inclusive, safe, resilient and sustainable); and Number 12 (guarantee methods of sustainable production and consumption). The biggest problems are found in objectives related to water, with respect to inequality, and action to save the climate, such as that in Number 17 (sow alliances to fulfill the Objectives).
One has to remember that in 2017, there were serious problems in terms of access to water, caused mainly by the drought and the lack of smart management vis-à-vis this scarce resource. Inequality kept growing as much in the GINI (¿) index as well as in the other indices, making this shameful situation an old-time Spanish classic. Furthermore, in terms of climate change objectives, the report brings to light an increase of 4.5% in CO2 emissions, and 10% of this attributed to the large energy and industrial companies. As far as the ODS17 is concerned (The 17 Sustainable Growth Objectives), there has been a notable decrease given to Spain in terms of foreign aid.
1. THE END OF POVERTY
2. ZERO HUNGER
3. HEALTH AND WELLBEING
4. QUALITY OF EDUCATION
5. EQUAL RIGHTS FOR MEN AND WOMEN
6. CLEAN WATER AND HYGENE
7. AFFORDABLE AND CLEAN ENERGY
8. DECENT JOBS AND ECONOMIC GROWTH
9. INDUSTRY, INNOVATION AND INFRASTRUCTURE
10. REDUCING INEQUALITY
11. SUSTAINABLE CITIES AND COMMUNITIES
12. RESPONSIBLE PRODUCTION AND CONSUMPTION
13. CLIMATE ACTION
14. UNDERWATER ECOLOGY AND LIFE
15. LANDBASED ECOSYSTEM
16. PEACE, JUSTICE AND SOUND INSTITUTIONS
17. PARTNERSHIPS AND ALLIANCES TO FULFILL OBJECTIVES
(Source: The Sustainability Observatory)
Not only can we see the big problems that we have in some indices, in which we are in bad shape, but also the fact that we are either headed for worse, or have no plans to make good. For example: we continue witnessing problems among people who, despite being employed, are still living in poverty. Additionally, there is a high rate of unwanted part-time employment that affects women more than men, likewise in terms of unwanted impermanent job contracts.
There is still a long way to go. Problems are not solved with grand speeches or declarations, nor big lectures on human principles. It seems evident that, through various responsibilities, through companies large and small, in all levels of government administrations, the NGOs, and we the people, should all work together to solve these grave shortcomings that we still have in order to achieve a more sustainable future.
In the words of Antonio Guterres, the UN Secretary General: “The rate of global progress is not keeping in line with the Agenda in order to stay within its objectives; it is necessary that countries and all parties interested, at all levels, take immediate and accelerated measures. (…) With only 12 years to go until 2030, we need to propel ourselves into urgency. Fulfilling Agenda 2030 requires immediate measures that are sped up by countries, as much as collaborative partnerships between governments, and interested parties at all levels. This ambitious Agenda needs a profound change that goes above and beyond business as usual.”
Fernando Prieto y Carlos Alfonso son miembros del Observatorio de la Sostenibilidad (OS).
It could be due to the cool and perky logo, but the Objetivos de Desarrollo Sostenible (Sustainable Growth Objectives) is creating interest in public administrations, companies, NGOs and even political parties. Presented here are ways of trying to measure sustainability, taking into account dynamic aspects found within four areas of analytical studies considered essential: persons (social aspect), the ecology (environment), the economy, and solidarity (governance). While it is a fact that a large part of these objectives are completely interrelated and some even obtaining high scores, the objective is to get good scores in each and every aspect, not leaving one part behind. It is for this reason that these four indicators give a more accurate view of a country’s progress which, for example, is better than GDP or other artificial indicators.
The most refined tools to measure progress in various countries are used by the UN, of course, but beyond this, these tools are the fruits of a large scientific consensus that take into account variables to measure populations’ actual state of well-being, health trends and, therefore, the degree in which policies carry out laws that lead to social progress, the reduction of social inequality, the struggle against climate change, and last but not least the conservation and efficient use of the environment’s resources. What is also taken into account are the principal threats to human life that we have this present day: climate change, extreme poverty, drought, decreasing biodiversity, etc. Also noted are ways of carrying out policies dealing with equality, tolerance, the protection of children and minors, and women’s rights and freedom.
The UN published its yearly report on the 27th of June based on these 17 Sustainable Growth Objective factors. The results highlight clear progress at the start of the century: a 35% decrease in infant mortality rate in Africa, and a 50% mortality rate decrease in children under five. In southern Asia, the risks of forced marriages on young girls decreased by more than 40%. In developing countries, people with access to electricity has more than doubled. In our planet, workforce productivity has increased and, in turn, has seen a decrease in unemployment. More than 100 countries count on sustainable production and consumption initiatives and policies.
Problems are not solved with big announcements or lecturing on human principles
The report, however, shows that, in some areas, there is insufficient progress made when it comes to fulfilling the goals set by Agenda 2030. This is especially true in the case of marginalized and disadvantaged groups: the young are three times more likely to be unemployed compared to adults, and less than half of all children and adolescents get to half of the minimum level necessary in reading and mathematics. In 2015, there were 2.3 billion persons that did not have the basic human sanitary standards to live adequately and 892 million persons still had to excuse themselves in the middle of mother nature. Close to a billion people in rural areas live are without electricity. In sub-Saharan Africa, HIV cases among women of childrearing age is 10 times greater than the global average. On a final note, nine out of 10 city-dwelling persons breathe toxic air.
Furthermore, albeit some forms of discrimination against women and girls are decreasing, gender inequality keeps women behind that deprives them of their basic rights and opportunities. Global conflicts, climate change and other growing inequalities add to their new challenges. After a prolonged decrease, the number of undernourished persons went up to 777 million in 2015 and to 815 million in 2016, owing to, in large part, to geopolitical conflicts, droughts, and natural disasters related to climate change. The 2017 hurricane season in the north Atlantic was the most costly in history, and the average global temperature in the last five years registered at its highest since data started to be gathered.
For its part, the Sustainability Observatory has, for the third year, issued an annual report (#ODS18) about the state and trends with regards to sustainability in Spain in 2018. Using the latest data, the report analyzes the progress as much as the challenges in fulfilling the 17 objectives.
1. THE END OF POVERTY
2. ZERO HUNGER
3. HEALTH AND WELLBEING
4. QUALITY OF EDUCATION
5. EQUAL RIGHTS FOR MEN AND WOMEN
6. CLEAN WATER AND HYGENE
7. AFFORDABLE AND CLEAN ENERGY
8. DECENT JOBS AND ECONOMIC GROWTH
9. INDUSTRY, INNOVATION AND INFRASTRUCTURE
10. REDUCING INEQUALITY
11. SUSTAINABLE CITIES AND COMMUNITIES
12. RESPONSIBLE PRODUCTION AND CONSUMPTION
13. CLIMATE ACTION
14. UNDERWATER ECOLOGY AND LIFE
15. LANDBASED ECOSYSTEM
16. PEACE, JUSTICE AND SOUND INSTITUTIONS
17. PARTNERSHIPS AND ALLIANCES TO FULFILL OBJECTIVES
(Source: The Sustainability Observatory)
On a human level, Spain has continued with its dismal results in the Sustainable Growth Objectives scale, particularly in terms of social justice and living conditions. Social indicators are intricately linked, and factors such as poverty, unemployment, the inability to purchase a home, or inequality point to this same problem. The evolution of these aforementioned indicators is unsatisfactory.
The table showing the trends illustrate slight positive progress in only three of the 17 objectives, specifically: Number two (Zero Hunger, Healthy diet, Ecological agriculture); Number 11 (making cities and places with human concentrations inclusive, safe, resilient and sustainable); and Number 12 (guarantee methods of sustainable production and consumption). The biggest problems are found in objectives related to water, with respect to inequality, and action to save the climate, such as that in Number 17 (sow alliances to fulfill the Objectives).
One has to remember that in 2017, there were serious problems in terms of access to water, caused mainly by the drought and the lack of smart management vis-à-vis this scarce resource. Inequality kept growing as much in the GINI (¿) index as well as in the other indices, making this shameful situation an old-time Spanish classic. Furthermore, in terms of climate change objectives, the report brings to light an increase of 4.5% in CO2 emissions, and 10% of this attributed to the large energy and industrial companies. As far as the ODS17 is concerned (The 17 Sustainable Growth Objectives), there has been a notable decrease given to Spain in terms of foreign aid.
1. THE END OF POVERTY
2. ZERO HUNGER
3. HEALTH AND WELLBEING
4. QUALITY OF EDUCATION
5. EQUAL RIGHTS FOR MEN AND WOMEN
6. CLEAN WATER AND HYGENE
7. AFFORDABLE AND CLEAN ENERGY
8. DECENT JOBS AND ECONOMIC GROWTH
9. INDUSTRY, INNOVATION AND INFRASTRUCTURE
10. REDUCING INEQUALITY
11. SUSTAINABLE CITIES AND COMMUNITIES
12. RESPONSIBLE PRODUCTION AND CONSUMPTION
13. CLIMATE ACTION
14. UNDERWATER ECOLOGY AND LIFE
15. LANDBASED ECOSYSTEM
16. PEACE, JUSTICE AND SOUND INSTITUTIONS
17. PARTNERSHIPS AND ALLIANCES TO FULFILL OBJECTIVES
(Source: The Sustainability Observatory)
Not only can we see the big problems that we have in some indices, in which we are in bad shape, but also the fact that we are either headed for worse, or have no plans to make good. For example: we continue witnessing problems among people who, despite being employed, are still living in poverty. Additionally, there is a high rate of unwanted part-time employment that affects women more than men, likewise in terms of unwanted impermanent job contracts.
There is still a long way to go. Problems are not solved with grand speeches or declarations, nor big lectures on human principles. It seems evident that, through various responsibilities, through companies large and small, in all levels of government administrations, the NGOs, and we the people, should all work together to solve these grave shortcomings that we still have in order to achieve a more sustainable future.
In the words of Antonio Guterres, the UN Secretary General: “The rate of global progress is not keeping in line with the Agenda in order to stay within its objectives; it is necessary that countries and all parties interested, at all levels, take immediate and accelerated measures. (…) With only 12 years to go until 2030, we need to propel ourselves into urgency. Fulfilling Agenda 2030 requires immediate measures that are sped up by countries, as much as collaborative partnerships between governments, and interested parties at all levels. This ambitious Agenda needs a profound change that goes above and beyond business as usual.”
Fernando Prieto y Carlos Alfonso son miembros del Observatorio de la Sostenibilidad (OS).